Hay una asociación curiosa entre los pescadores y los delfines de Laguna, Brasil, en donde animales y personas en las playas de Molhes de Barra colaboran en la captura de bancos de lisas.
Se trata de una práctica que se cree viene de siglos atrás. Durante varias generaciones un grupo de delfines conducen estos bancos de peces a la costa para que los pescadores puedan apresarlos con sus redes. Avisan de la llegada de estos agitando la cola y la cabeza para llamar la atención, es todo un espectáculo.
Los delfines se aprovechan del caos y pueden pescar fácilmente peces más grandes con esta encerrona pero sin duda son los pescadores los que obtienen el mayor beneficio de tal cooperación. Los investigadores aún no han podido dar respuesta a su valiosa aportación, y es que se sabe que son animales muy inteligentes pero ¿hasta que punto?.
Es habitual que los pescadores vean a los delfines y otros mamíferos marinos como competidores o ladrones a los que es preciso eliminar. Sin embargo, en Laguna son compañeros necesarios y han sido declarados Patrimonio Natural del Municipio por lo que me pregunto ¿es posible que colaboren a sabiendas de que su amistosa relación les asegura la supervivencia?.
No hay duda de su inteligencia, se sabe que se organizan en grandes clanes, estableciendo alianzas o rupturas con otras comunidades para defender a sus hembras, y hasta eligen en algunos casos cambiar de bando si les interesa.
Así pues esta alianza podría ser una forma de protección, o simplemente una complicidad (en el buen sentido) propia de estos asombrosos mamíferos. En cualquier caso, es un ejemplo de colaboración asombroso, todo un lujo que espero se siga manteniendo en el tiempo.
Hay tantas cosas que no sabemos sobre otras especies que todo podría ser. No obstante, siempre es arriesgado y acaso equívoco intentar una explicación de la vida animal desde nuestro antropocentrismo. Digno de observar a los animales y de admirar en aquello de lo que podemos tomar ejemplo. Se irá sabiendo.
ResponderEliminarMe ha parecido interesante comparar a los delfines con las personas. Y aunque les adjudico una posible estrategia en su comportamiento, lo veo como un rasgo noble muy animal (lejos de la doblez de la conducta humana) buscar el amparo y la cooperación que supone una asociación.
ResponderEliminarCreo que el individualismo y el egocentrismo es una penosa característica nuestra, y como bien apuntas el apoyo de la comunidad que tan bien funciona en el reino animal debería de ser un ejemplo para nosotros.
Gracias por tu observación que enriquece este espacio, un abrazo.